Está aquí: Inicio Actualidad COVID-19 en fumadores: son 2,4 veces más susceptibles de ingresar en la UCI
Existe una relación negativa entre fumar y la progresión y desenlace de la Covid-19. De hecho, revisiones bibliográficas recientes muestran que los fumadores son 1.4 veces más propensos a presentar síntomas más severos de Covid-19 y 2.4 veces más susceptibles de ingresar en la UCI por este motivo.
La Sociedad Española de Salud y Medicina Integrativa (SESMI) en el Dia Mundial Sin Tabaco (31 de mayo), alerta de que el 18,8% de mujeres y el 25,6% de hombres fuman a diario, y por ello explican que “dejar de fumar ayuda al control de las enfermedades cardiovasculares y respiratorias que son factores de riesgo para la Covid-19”
“Fumar es altamente adictivo”, señalan desde SESMI. “La nicotina llega en 7 segundos al Sistema Nervioso Central (SNC), lo que contribuye a su alto poder adictivo, y su vida media en el SNC es de dos horas”, añaden. La nicotina provoca un estímulo inmediato de las glándulas adrenales con un resultado de descarga de adrenalina con efecto simpático: aumento de la glucemia, aumento de la presión arterial, aumento de la frecuencia respiratoria y del ritmo cardíaco.
Ayudar a las personas a dejar de fumar pasa por facilitar la deshabituación y, por tanto, reducir el efecto de la dependencia y de la abstinencia. Porque si bien es cierto que “dejar de fumar durante varias semanas mejora los niveles de nicotina, no se puede considerar al exfumador desintoxicado hasta mucho tiempo después, debido a las conductas aprendidas y a la neuroadaptación tras años de exposición al tabaco”, explican desde SESMI.
De hecho, los síntomas del síndrome de abstinencia comienzan al cabo de unas horas de haber consumido el último cigarrillo y llegan a su máximo pico a las 24-48 horas, desapareciendo a las 4 semanas y son: deseo imperioso de tabaco, malestar, debilidad, ansiedad, humor disfórico, irritabilidad, inquietud, insomnio, aumento del apetito, aumento de la tos, ulceraciones bucales, dificultad de concentración.
Dejar de fumar es lo mejor que podemos hacer para nuestra salud. Por ello, SESMI recuerda a la población que quiera abandonar el tabaco que “se apoye y utilice los recursos sanitarios y los tratamientos existentes”