La Sociedad Valenciana de Neumología y APEPOC apuestan por la necesidad de estrategias coordinadas entre Neumólogos, Atención Primaria y las administraciones que aseguren recursos para la prevención, el diagnóstico precoz y el tratamiento efectivo de esta enfermedad. 

Como cada año el tercer miércoles del mes de Noviembre se conmemora el «Día Mundial de la EPOC».

Cada año queremos concienciar a la población de la importancia de conocer y cuidar su Salud Respiratoria.

La EPOC es la tercera causa de muerte a nivel mundial, una de cada diez personas adultas en el mundo la padece. En nuestro país es la cuarta causa de mortalidad, después de las enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares y cáncer. 

El tabaquismo sigue siendo considerado una es uno de los principales factores de riesgo pero hay otros factores como la exposición al humo de biomasa y la polución ambiental que también son factores de riesgo importantes y hoy hay evidencia robusta que muestra que el desarrollo deficiente pre y post natal de los pulmones como resultado de la malnutrición, infecciones y la exposición pasiva a contaminantes también contribuyen al desarrollo de la enfermedad.

Detectar a tiempo la EPOC es vital, y una prueba sencilla como es la espirometría nos permite el diagnóstico de la enfermedad, tanto desde la SVN como desde APEPOC queremos insistir en la necesidad de la realización de espirometrías  desde el primer nivel asistencial para diagnosticar de forma precoz a los pacientes en riesgo de padecer EPOC.

El diagnóstico de la EPOC precisa de la coordinación de todos los profesionales implicados en la atención de éstos pacientes, por ello, la Sociedad Valenciana de Neumología (SVN) junto a la Asociación de Pacientes con EPOC (APEPOC), quiere destacar la importancia de la detección precoz de la enfermedad y la necesidad de establecer medidas que ayuden a mejorar el pronóstico de nuestros pacientes.

No debemos olvidar que la pandemia del coronavirus no sólo en España sino en todo el mundo ha puesto en primera línea a los neumólogos y a la neumología. El pulmón es sin duda el órgano diana que ha marcado el pronóstico de esta devastadora enfermedad. Como especialidad hemos sido el relevo y la continuación de la UCI, y su sostén cuando las camas escaseaban, la especialidad que ha manejado la ventilación no invasiva en las Unidades de Cuidados Respiratorios Intermedios (UCRIS), en las salas de neumología, algo que ha salvado muchas vidas. Y aunque actualmente la incidencia de pacientes hospitalizados cada vez sea menor, no parece que vaya a disminuir la presencia de la enfermedad por la posibilidad de la aparición de un nuevo brote, nuevas cepas o la de convivir con otras enfermedad infecciosas tales como la gripe estacional que cada invierno llena los servicios de neumología, las urgencias de nuestros hospitales y colapsa la Atención Primaria. El seguimiento de estos pacientes con secuelas respiratorias postCovid va a suponer, un aumento importante de pacientes en nuestras consultas.

Junto con los pacientes COVID y sus secuelas, no debemos perder de vista el porcentaje de pacientes respiratorios que ya se manejaban previamente a la pandemia. Se calcula que en España, existe una media de 3,4 neumólogos por cada 100.000 habitantes, mientras que la OMS determina que debe llegarse hasta 4/ 100.000 y no debemos perder de vista, que algunas CCAA no alcanza ni la media nacional.

 
Para ello es necesario:

• Mejora de las plantillas de profesionales tanto de Neumología como de AP.
• Dotación de espirómetros y creación de agenda de espirometrías en aquellos centros que aún no disponen de dicha prueba.

Según APEPOC, las principales demandas de los pacientes EPOC a Sanidad después de la pandemia son:

• Retomar las revisiones, priorizando la atención de los pacientes que requieren un diagnóstico precoz, y la de pacientes con mayor fragilidad.
• La teleconsulta como modelo complementario para dar a apoyo a la presencial.
• Retomar la realización de la espirometría en los Centros de Salud.